Lo obvio

A estas alturas, uno piensa que la gente sabe lo que realmente te pasa, y por qué estás encerrado en esta sede de Bienestar Social, para reunirte en asambleas, fabricar pancartas para la manifestación, hacer un blog, etc... Pero podría ocurrir que haya gente que no lo sepa. Nosotros ya lo tenemos ya muy masticadito y digerido. Quizás, sea el momento de volver unos pasitos para atrás, recapitular y exponer el motivo de este encierro a un hipotético visitante recién llegado de vacaciones o de Venus, ¡qué sé yo! que cada uno va dónde quiere o puede, oiga)...

Para empezar, ¿cuál es la unidad de medida de la dignidad humana ?. Cuánto pesa o cuánto mide la dignidad. No creemos que sea un concepto que se pueda fraccionar. O se respeta o no.

El gobierno municipal en sus relaciones laborales con la plantilla, siempre ha obviado ese principio. Ha utilizado como estrategia para justificar sus recortes, hundir la imagen de los trabajadores municipales, alimentado estereotipos y jugando a las mentiras y medias verdades. Cuestionado nuestra profesionalidad y nuestra legitimidad, socavando nuestra dignidad, para esconder sus verdaderos fines, que nada tienen que ver con el bienestar de la ciudadanía jerezana.

Por eso estamos aquí, no sólo para defender nuestro puesto de trabajo, sino para defender también unos servicios públicos accesibles a toda la ciudadanía. Servicios que son un derecho, no un negocio con el que especular, ni una caridad que ofrecer de manera arbitraria.

Pero estamos aquí encerrados también, para defender nuestra dignidad como trabajadores y trabajadoras. Dignidad agredida por la indignidad de nuestro gobierno local.